sábado, agosto 17, 2013

ACTOS I y II



ACTO I

Dime que me quieres,
Que me necesitas,
Que sin mí tu vida no es nada.

Dime que soy bella,
Dime que soy lista,
Que soy tu estrella más preciada.

Dime que te cante,
Sé mi pianista,
Compón de esta súplica una balada.

Cólmame de besos,
Dame mil caricias,
No dejes que mi mano caiga helada.

Y aún así...

ACTO II

Te digo que te quiero,
que te necesito,
Y tú nunca me respondes nada.

Te digo que eres bella,
te digo que eres lista,
pero siempre desvías la mirada.

Quiero que me cantes,
ser tu pianista.
Y, sin embargo, permaneces callada.

Intento besarte,
darte mil caricias,
pero parece que vivas amortajada.

No crees lo que digo,
ni ves lo que hago,
vives en tu infelicidad encerrada.

Abre los ojos por fin,
mira a tu espalda y ve
las mil caras que sonríen a tu paso.
Hay quien no sabe hablar de amor
pero es que tú, además, no sabes escucharlo

No hay comentarios:

Publicar un comentario